CONSTRUIR nuestro glorioso futuro es el gran desafío para
este tiempo! ¿Qué estoy viendo? ¿Cuál es mi mirada de ese mañana que está pronto a suceder? Lo que no podemos ver no podemos conquistar, es urgente sensibilizarnos para establecer la ruta correcta y la estrategia de conquista.
¿Con lo que soy puedo construir lo que estoy viendo? ¿Has- ta dónde me alcanzan mis competencias para lograr llegar a conquistar mi destino en esta tierra? Estamos frente a nuestra mejor temporada para CONSTRUIR LA CASA,
Palabra Profética 2022
CONSTRUIR nuestro glorioso futuro es el gran desafío para
este tiempo! ¿Qué estoy viendo? ¿Cuál es mi mirada de ese mañana que está pronto a suceder? Lo que no podemos ver no podemos conquistar, es urgente sensibilizarnos para establecer la ruta correcta y la estrategia de conquista.
¿Con lo que soy puedo construir lo que estoy viendo? ¿Has- ta dónde me alcanzan mis competencias para lograr llegar a conquistar mi destino en esta tierra? Estamos frente a nuestra mejor temporada para CONSTRUIR LA CASA.
La Red Internacional de Ministerios, REDIME, la cual tiene más de ochocientos ministerios afiliados en veintitrés países. Somos una Red de Ministerios Unidos en Amor, que operan en el poder del Reino para gobernar en los siete montes. REDIME es un edificio espiritual, administrativo y logístico con planos apostólicos y un destino profético.
MISIÓN
Equipar a los santos con los dones espirituales, habilidades y herramientas que nos permitan administrar y edificar el reino en las diferentes esferas de la sociedad.
VISIÓN
Manifestar el poder de la gloria de Dios en toda la tierra.
Próximos Eventos
Blog
Principio
¡Una cosa es la fe en Dios, y la otra en la fe de Dios! La fe en Dios nos permite creer en él y tener acceso a sus promesas como sus hijos. La fe de Dios nos impulsa hacer aquello qué es imposible en las habilidades humanas. Pero sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan (Hebreos 11.6). La fe en Dios nos coloca en el lugar para ser galardonados, la fe de Dios nos impulsa actuar cómo lo haría él en los momentos más apremiantes.